Manejamos a la nueva EX30 EV ¿Podrán los problemas de software opacar las virtudes de la nueva Volvo?
La nueva EX30 representa una nueva etapa para la compañía sueca, ya que es el modelo más pequeño y accesible que Volvo haya desarrollado (al menos hasta ahora) únicamente con propulsión a baterías.
Para seguir con el discurso de sostenibilidad sin dejar de lado el tradicional y esperado diseño escandinavo de muy buen gusto, Volvo ha logrado en la EX30 un producto muy atractivo; desde el exterior con sus rasgos modernos que integran los detalles visuales más reconocibles de la marca, dígase las luces con el “martillo de Thor” o las calaveras verticales incrustadas en el poste, hasta un interior minimalista que combina una serie materiales reciclados con diferentes texturas y colores que tienen elementos funcionales muy interesantes, como la consola central que esconde un cajón retráctil con portavasos o la colocación de la guantera justo al centro del tablero para que pueda estar a alcance de los pasajeros delanteros, todo en un paquete de solo 4.23 m de longitud con proporciones muy bien logradas.
Y es que, más allá de lograr un producto muy atractivo visualmente, la marca sueca ha recurrido a integrar dichos detalles para poder utilizar la menor cantidad de materiales en su nuevo vehículo, prescindiendo de elementos extra, como controles eléctricos o bocinas en las puertas para facilitar su manufactura y solucionarlo mediante elementos clave como la barra de sonido colocada en la base del parabrisas que resulta ser suficiente y, los controles de los vidrios integrados en la consola central, lo que al mismo tiempo, permite mantener los costos lo más bajo posibles.
Esto también se ve reflejado en el infoentretenimiento, con su pantalla vertical de 12.3 pulgadas que integra básicamente todos los controles de la EX30, desde el sistema operativo con Google integrado, el climatizador, la apertura de la guantera y hasta las luces intermitentes o el cuadro de instrumentos.
Sin embargo, las reducidas cotas exteriores se ven reflejadas en un espacio limitado en el interior con una apertura de las puertas traseras no muy amplia que puede dificultar maniobras y un espacio para piernas apenas suficiente para adultos de más de 1.80 m de estatura.
Justo como lo esperábamos
La EX30 se ofrece en dos configuraciones con un solo motor delantero que genera 272 HP y 253 lb-pie de torque, sumado a un paquete de baterías de 51 kWh de capacidad en la versión inicial (Core $689,900) o, como en nuestro caso, uno de 69 kWh (Plus $775,900 y Ultra $849,900), mediante los cuales, promete autonomías de 344 o, 476 km, respectivamente.
Esta configuración transmite mucha confianza incluso a altas velocidades, así como una aceleración y empuje muy saludables que permiten rebasar sin mayores problemas, aunque siendo honestos, no esperábamos menos de una Crossover eléctrica.
Lo que sí sorprende, es la calidad de marcha e insonorización, permitiendo un andar muy cómodo que únicamente insinúa su peso cuando un “entra pasado” en una curva, aunque sin mayores complicaciones.
Desafortunadamente, el lanzamiento de EX30 se ha visto opacada en ciertos mercados por distintos problemas de software, que hicieron que muchos clientes, especialmente en Reino Unido, pidieran un reembolso de su compra, aunque la marca nos prometió que los problemas iniciales estaban identificados y minimizados, gracias a la posibilidad del sistema para recibir actualizaciones de manera inalámbrica.
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