Los lanzamientos más importantes para Ford han sido retrasados para prevenir problemas de calidad y evitar llamados a revisión
Con una de las gamas más deseables en el mercado, Ford nos hará esperar un poco más para conocer las mejoras en sus modelos Maverick, Bronco Sport y Explorer, al recibir retrasos por implementar nuevos procesos que permitan evitar recalls (llamados a revisión).
Hemos visto algunas fotos espía y, sabemos que hay cambios significativos en modelos como la pick-up compacta de la marca americana, aunque junto con la pequeña Bronco y la popular Explorer, habrá que esperar todavía más.
Durante la conferencia sobre los resultados financieros del primer trimestre de Ford, el CEO Jim Farley reveló que los nuevos modelos se retrasarán hasta 6 semanas antes de salir de las líneas de producción, para dar tiempo para realizar controles de calidad exhaustivos antes de que sean enviados a los clientes.
Esta estrategia fue adoptada por Ford a inicios de año con la actualización de la F-150 y Lobo, con reportes que señalan a más de 60 mil ejemplares de la pick-up más popular del planeta, esperando en los estacionamientos de la planta de Detroit, mientras los ingenieros revisaban potenciales problemas de calidad.
Farley menciona que, dichas comprobaciones realizadas por el equipo permitieron que Ford evitara hasta 12 recalls, por diferentes problemas de montaje y hasta fallas de software.
Por ejemplo, las inspecciones encontraron que el arnés de cables de la F-150 estaba instalado incorrectamente detrás del tablero y podría rozar una pieza de meta, lo que con el tiempo, podría haber resultado en el corte de los cables y provocado que el cuadro de instrumentos dejara de funcionar.
La Ford Explorer está siendo sometida a las mismas pruebas rigurosas e inspecciones de calidad después de la producción, lo que se replicará con la Bronco Sport 2025 y la renovada Maverick que deberían llegar a finales de año.
De momento, Ford tiene el nada glamoroso título de tener el mayor número de recalls que ningún otro fabricante en Estados Unidos, lo que se traducen en p+erdidas de hasta 4,800 millones de dólares al año.
Por otro lado, Ford presume un incremento del 10% en calidad con sus modelos 2024 y su tasa de defectos ha caído un 20 por ciento, alineándose con el resto de la industria, aunque todavía ven en Toyota un ejemplo a seguir, según el jefe de operaciones de la marca, Kumar Galhotra.
Si bien, la decisión de arreglar desperfectos después de la producción no es ideal, está permitiendo a Ford mejorar sus procesos desde el diseño e ingeniería de sus modelos, para mejorar sustancialmente en el futuro.
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