El elevado costo que se requiere para reparar los sistemas de seguridad diseñados para prevenir accidentes, hace que muchas veces no sea viable repararlos
Mientras pasa el tiempo, los vehículos se están haciendo cada vez más seguros, con tecnología como las ADAS, presente en modelos cada vez más alcanzables para la mayoría de los usuarios, aunque todo tiene un costo, literalmente.
Resulta que los costos para reparar vehículos equipados con algunas de las asistencias avanzadas a la conducción, mejor conocidas como ADAS, ha incrementado de manera casi exponencial, resultando en que el 21 por ciento de los autos accidentados, sean declarados como pérdida total por las compañías aseguradoras.
Irónicamente, los sistemas de seguridad diseñados específicamente para prevenir dichos accidentes en primer lugar, suelen ser señalados por las aseguradoras como el principal culpable de esta situación, ya que es básicamente inviable económicamente, de reparar.
Reemplazar la multitud de sensores y cámaras que son utilizados por los sistemas ADAS incluidos en muchos de los modelos nuevos, como el sistema de frenado de emergencia y, además calibrarlos para su correcto funcionamiento, puede incrementar la factura de reparación en miles de dólares.
De acuerdo con Bloomberg, quienes citan información de CCC Intelligent Solutions, dicen que esta cuestión incrementa el costo de reparación en gran medida, ya que hay un gran aumento de mano de obra involucrado, así como materiales necesarios incluso, en las reparaciones más básicas de los autos.
Ahora bien, el reporte señala que, a pesar de los elevados costos de reparación, los EVs son todavía menos susceptibles a ser declarados como pérdida total, que los autos de combustión, aunque, sugiere que esto podría cambiar en cualquier momento, por la caída del valor de reventa de los EVs en general.
Mientras tanto, los ganadores son las empresas de subastas de rescates que han estado incrementando sus ganancias casi exponencialmente en los últimos años, como Copart quienes tienen una predicción de que la proporción de autos siniestrados que son pérdida total, podría pasar al 30 por ciento, si los fabricantes no hacen que sus sistemas ADAS puedan evitar accidentes de una manera dramática.
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