Con una ventaja tecnológica en EVs de cerca de 10 años, la industria global necesita al menos de la propiedad intelectual de China dice Farley
Junto con el resto de la industria automotriz occidental, Ford necesita desesperadamente deshacerse de las amenaza que representan los fabricantes chinos, aunque para lograrlo, necesitan el conocimiento técnico del gigante país asiático, de acuerdo con el mandamás del fabricante americano.

El CEO de Ford, Jim Farley, le contó al New York Times que China se encuentra años por delante de los americanos, en cuanto a la fabricación de baterías y, que la única oportunidad de que Ford pueda competir contra sus pares chinos, es usando su tecnología a su favor.
“La manera de competir contra ellos es teniendo acceso a su Propiedad Intelectual, del mismo modo que ellos utilizaron la nuestra hace 20 años, para después utilizar nuestro ecosistema innovador e ingenio americano y nuestra gran escala e intimidad con el cliente, para vencerlos a nivel mundial” comentó Farley a Thomas L. Friedman, de NYT.
Lo interesante, es que Farley no habla de un par de futuro lejano, sino de algo que ya está sucediendo. La gigantesca fábrica de baterías BlueOval que está a medio construir, producirá baterías de fosfato de iones de litio que dependen de la tecnología de CATL de China.

Curiosamente, la tecnología de baterías LFP, ahora propiedad de CATL, fue desarrollada en Estados Unidos fue vendida muy barata a los chinos. La tecnología LFP fue descubierta por la Universidad de Texas, y comercializada por A123 Systems LLC, una startup que recibió mucho dinero por parte de la administración del Presidente Obama.
Sin embargo, el mercado de eléctricos no se desarrolló de la manera esperada y A123 quebró, con sus remanentes, incluyendo la propiedad intelectual de baterías, eventualmente fue colorad por lo que en su tiempo era la compañía de autopartes más grande de China.
Se podría argumentar que no había manera de saber que los EVs serían parte tan importante del mercado hace una década, pero los chinos lo sabían y, de hecho, Tesla también lo tenía claro desde ese entonces.

Visto desde la perspectiva del 2025, no deja de sorprender que la tecnología no solo logró salir de los Estados Unidos, sino que cayó justo en las manos de su adversario más grande, uno que, de acuerdo con Bloomberg, controla el 83 por ciento de la fabricación de botarías de iones de litio a nivel global.
Ford está desarrollando un eléctrico de menos de $30 mil dólares para enfrentar a los EVs accesibles de China que todavía no llegan al territorio americano todavía, pero que ya están haciendo acto de presencia en otros mercados donde Ford vende sus autos.
Por lo que los aranceles en autos importados de China a EUA permite proteger a fabricantes como Ford ante la amenaza de marcas como BYD, pero al mismo tiempo, afectan el costo de importación de modelos como la Lincoln Nautilus hacia el vecino país del norte.
Dejar una respuesta